´El Gobierno retrasó los pagos al personal de ambulancias´

Artea niega las acusaciones de GSC de tener "deudas millonarias" con la Seguridad Social.

LAURA PÉREZ SANTA CRUZ DE TENERIFE

La patronal de ambulancias Artea acusó ayer a la Consejería regional de Sanidad de retrasarse en los pagos por el servicio de transporte sanitario terrestre, que presta actualmente la empresa Manuel Guerra Castellano. Su secretario, Eugenio de Armas, aseguró que el ingreso correspondiente al mes de enero se realizó el pasado día 10 de febrero, lo que impidió ingresar las nóminas de los trabajadores antes de esa fecha. Desde Artea, además, negaron tener deudas millonarias con la Seguridad Social, hecho del que les acusó la empresa pública GSC -responsable de este servicio- quien señaló que la empresa Manuel Guerra Castellano "ha mantenido con la Tesorería de la Seguridad Social deudas millonarias superando en muchos meses el millón de euros". De Armas aseguró que a día de hoy la empresa Manuel Guerra Castellano no tiene ninguna deuda con la Seguridad Social, de lo que aseguró tiene documentos que lo avalan.

Acusaciones falsas. Artea hizo estas declaraciones después de que la empresa pública Gestión de Servicios para la Salud (SCS) y Seguridad en Canarias (GSC) calificara como "absolutamente falsas" las denuncias presentadas por una de las patronales del transporte sanitario terrestre sobre supuestas irregularidades en la adjudicación del concurso de ambulancias, el cual se falló de forma provisional en diciembre pasado, según publicó ayer el periódico La Provincia.Las presuntas irregularidades, denunciadas ante la Fiscalía Anticorrupción del TSJC por la patronal Artea, y a las que se sumó este lunes en sus sospechas el líder del PSC, Juan Carlos Alemán, "son, sin el menor género de dudas, falsas y tienen causa exclusiva en el interés de algún licitador de ser adjudicatario sin haber obtenido la mejor puntuación en salvaguarda del interés general", señaló GSC.

La empresa pública razonó que no ha salido hasta ahora al paso de las denuncias que se vienen publicando en medios periodísticos de la región porque ha considerado "prudente y aconsejable mantener un silencio respetuoso con los técnicos" que trabajan en los recursos administrativos presentados a la resolución del concurso, adjudicado de forma provisional.

Respecto a la primera supuesta irregularidad imputada, acerca de que uno de los licitadores adjudicatarios pintó los vehículos con el anagrama y el color marcado por los pliegos del concurso con antelación a su publicación, la empresa pública manifiesta que "se fijaron unos colores de pintura para los vehículos diferentes a los que hasta ese momento se utilizaban" y que sus características se dieron a conocer en el perfil del contratante y se publicaron en la página web del Gobierno el 31 de julio de 2008.

Licitador. No fue hasta el 4 de agosto "cuando un licitador hizo pruebas con dicho color en sus ve-hículos, y no en toda su flota, sino sólo en tres". Además, señala GSC que "es tan absurda la denuncia que el propio denunciante también pintó varios de sus vehículos con el nuevo color, mucho antes de la adjudicación", aún provisional.

También es falsa la imputación de que uno de los licitadores adquirió 200 vehículos con antelación a la publicación de las bases del concurso, que se acreditó con las opiniones vertidas al respecto en periódicos en marzo y abril del pasado año. Asimismo, se acusó a la empresa GSC de permitir la presencia en la mesa de contratación de personas que no tenían que ver con el proceso y que, además, tienen intereses en el sector, hecho que fue negado por la Administración sanitaria.

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